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11 de diciembre de 2019
Tiempo de plantar
Haciendo la Huerta
Por Sofía Roca
Durante estos meses estuvimos preparando plantines en el invernáculo, que los vamos trasplantando periódicamente a la huerta.
En la huerta hay dos formas para sembrar. Una es la siembra directa, que consiste en colocar la semilla directamente donde vamos a cosechar la planta o su fruto. La otra, es hacer plantines en el invernáculo y, cuando alcanzan un tamaño considerable y un aspecto fuerte y saludable, los trasladamos al campo. Iniciar el cultivo de esta última forma permite un mejor cuidado de la planta en sus primeras fases de desarrollo y garantiza que llegue sin problemas a su madurez. La semilla estará más protegida del clima (frío, heladas, calor extremo, viento), de las hierbas competidoras, bichos, caracoles y aves del lugar, todo lo cual posibilita que la germinación sea exitosa y más rápida que la siembra directa. De este modo, podemos anticipar la producción y también ahorrar en semillas, sobre todo cuando estas son muy pequeñas y necesitan cuidados especiales para brotar. Además, se aprovecha mejor el espacio, se facilitan las labores de riego y se consume menor cantidad de agua que haciendo siembra directa.
¿Qué necesito para hacer plantines? Es una tarea sencilla, para la cual necesitamos sustrato (puede ser compost o algún preparado adquirido en el vivero), bandejas de germinación (también llamadas almacigueras o semilleros), pulverizador para riego y semillas. Es importante utilizar sustrato, que es una tierra porosa, enriquecida con nutrientes, ya que la contextura ligera y porosa del mismo aumenta la capacidad para absorber y retener la humedad, y los nutrientes son el alimento para que la planta crezca con fuerza. En la huerta, también agregamos humus, que obtenemos de nuestro propio criadero de lombrices. Por otro lado, les comento que se pueden utilizar las bandejas de germinación que se ofrecen en los viveros, o cualquier cajonera, bandeja o envase que tengamos en casa, por ejemplo, envases de yogur, potes de helado, tetrapaks. En estos casos, hay que realizar agujeros en la parte inferior del recipiente para que drene el agua.
¿Cómo hago la siembra? Ahora sí, podemos comenzar:
Paso 1: Rellenamos las bandejas con el sustrato.
Paso 2: Hacemos agujeritos en el sustrato, colocamos dos semillas aproximadamente en cada agujerito y, luego, lo cubrimos con sustrato. La profundidad de siembra depende del tamaño de la semilla, se dice como regla general que deben enterrarse a una profundidad equivalente a dos o tres veces el diámetro se la semilla.
Paso 3: Se coloca la bandeja en un lugar protegido, con temperatura cálida y luz. Si da mucho el sol, regar con mayor frecuencia o darle sombra en los momentos de altas temperaturas.
Paso 4: Regar con abundante agua con el pulverizador para riego que hará que el agua caiga como llovizna, condición importante para que no se inunde el almácigo ni se mueva la semilla. Otra manera de regar es colocar las bandejas en recipientes con agua, de forma tal que el agua ingresará por los orificios de las bandejas (como se muestra en la foto).
Paso 5: Escribe en la bandeja el nombre del cultivo que sembraste y la fecha de siembra, para evitar confusiones y tener presente estos datos para una mejor observación del desarrollo.
Ya realizado este proceso, únicamente queda la tarea de regar diariamente, para mantener la humedad constante. Luego, habrá que estar atentos al momento en que la planta deba ser trasplantada al terreno definitivo, toda vez que necesitará un espacio más amplio para su crecimiento y el desarrollo de sus raíces. Hay algunas circunstancias que indican que el cultivo está en condiciones de ser trasplantado: la cantidad de hojas que crecieron, en general cuando la planta tiene dos pares; el tamaño de la planta, cuando observamos que quedó chico el espacio; el color de las raíces, cuando éstas son blancas significa que son jóvenes, cuando comienzan a tornarse más oscuras indican que el plantín se está envejeciendo.
Por último, y no menos importante, hay que tener en cuenta que no se pueden hacer plantines de todas las hortalizas. Podemos hacer almácigos de tomate, cebolla, morrón, berenjena, lechuga, acelga, brócoli, coliflor, repollo, zapallito, pepino. Sin embargo, las papas, porotos, habas, arvejas, quinoa y zanahoria, deben sembrarse por siembra directa. Dejamos algunas fotos de los plantines que hicimos en el invernáculo de nuestra huerta de lechuga, espinaca, acelga, zapallito, tomate, albahaca, repollo, cebolla, apio y flores. Próximamente, les mostraremos cómo hacemos el trasplante y cómo van creciendo los cultivos.