"LA TERQUEDAD DE LAS CUCARACHAS", PASIÓN POR EL TEATRO

17 de abril de 2017

“La terquedad de las cucarachas”, pasión por el teatro

Por Victoria Giunta

Todo comienza con el reclamo salarial por parte de un obrero de una metalúrgica a su adinerado patrón, pero ¿por dónde continúa?

La terquedad de las cucarachas es una obra en la que el teatro habla sobre sí mismo: ¿qué es ficción y qué se puede reconocer como realidad? La historia es una invitación al mundo de los actores en la que muestran y reflexionan sobre su realidad, sus sueños, sus miedos y su pasión: el teatro.

Tres hilos narrativos se entretejen: la obra que están representando; la propia vida de los actores que se intercala y una tercera trama en la que la sala con sus espectadores se vuelve el enemigo. El amor hacia el género dramático trasciende a los personajes, y como en un juego de cajas chinas éstos interpretan a otros personajes; la ficción dentro de la ficción en un laberinto de espejos que rompe el umbral de la cuarta pared y llega al corazón del público.

El teatro que tantas veces se vio desplazado, el que se hace a partir de un enorme sacrificio, el espacio de expresión en el que cada uno es libre de ser quien quiera ser es un “agujero”, un espacio en el que el arte se conserva y perdura desde tiempos inmemoriales. Rubén Mosquera y su elenco reflexionan sobre temas sociales y humanos actuales, como también de la realidad del teatro mismo y de los actores, todo ello siempre acompañado de humor y picardía.

Después de ver la función compartimos con Justina Ovejero, quien interpreta a la delegada, su impresión sobre la obra:

—Lo que me inspiró y movilizó del material es poder compartir lo que es nuestra pasión por el teatro, y este amor inexplicable por lo que hacemos que, hasta en las peores condiciones (sin ganar un peso; trabajando capaz incluso sin papel higiénico; o ensayando hasta las dos de la mañana), nos llena el alma.

— ¿Cómo sentís la recepción del público?

—Lo que más me gusta de esta obra, más allá de si gusta o no, es que por lo menos la gente se va sabiendo y entendiendo lo que uno hace. Valoran distinto al artista después de ver la obra y eso es tremendo.

A mí sí me gustó muchísimo la obra. Los actores realmente transmiten el amor con el que trabajan, y eso lo sentí como una caricia y a la vez como una motivación para seguir alentando a los proyectos independientes.

Ficha Técnico Artística